A partir de ahora, las nuevas tarjetas físicas serán innominadas. Es decir que no llevarán tu nombre impreso en ellas. Esto tiene una serie de ventajas:
Seguridad: En caso de robo o extravío de tu tarjeta, quién la tenga en su poder no sabe tu nombre y gracias a eso podés evitar estafas. Con tu nombre podrían averiguar tu DNI y con esos datos hacer compras online. De esta forma, esa posibilidad queda descartada. Recordá que si la perdés o te la roban, siempre podes desactivar la tarjeta desde la app.
Practicidad: Al ser innominada, es más práctica la asignación a un usuario. Al recibir la tarjeta e ingresando los números de la misma en la aplicación, la activarás para la cuenta de Buenbit con la que hayas iniciado sesión. No necesitás una tarjeta especialmente emitida para una sola persona. Si alguien se encuentra con esa tarjeta que vos solicitaste e intenta activarla, la misma no va a estar relacionada con tu usuario, sino que la activará y quedará asociada al usuario que lo realice.
Transparencia: Una vez activada la tarjeta física, podrás ver los datos personales asociados a ella en la aplicación de Buenbit en cualquier momento y lugar desde tu dispositivo móvil.